Aunque muchas veces se confunden, no es lo mismo hernia que reflujo. Frecuentemente coinciden, pero pueden ser dos entidades que se manifiestan de diferente forma. Esto es, se puede tener una sin la otra.

Hernia hiatal
Hernia Hiatal.

La hernia hiatal es el paso del estómago a través del diafragma hacia el tórax. El reflujo es el paso de contenido gástrico (ácido o bilis) al esófago.

Aunque el reflujo se asocia a la esofagitis (inflamación de la mucosa del esófago), en una endoscopía se puede observar la mucosa normal hasta en el 70% de los casos. Los que no muestran esofagitis tiene enfermedad no erosiva y los que sí la tienen presentan la enfermedad por reflujo erosiva.

Síntomas

El síntoma característico de la enfermedad por reflujo es el ardor atrás del esternón y el regreso de alimento hacia la garganta.

Se han hecho estudios en donde se observa que este síntoma afecta hasta el 20% de la población por lo menos una vez a la semana. La severidad de los síntomas generalmente se correlaciona con el grado de exposición al ácido. Puede haber síntomas atípicos como son tos, crisis asmática, neumonitis por aspiración nocturna inadvertida.

Factores predisponentes

Malos hábitos higiénico-dietéticos, sobrepeso y obesidad.

Diagnóstico

Utilizamos como apoyo los síntomas, la serie esófago-gastroduodenal, la panendoscopía (endoscopía del esófago estómago y duodeno), la pHmetría (medición del pH en 24 horas) y la manometría esofágica (medir la presión del esfínter esofágico inferior).

Tratamiento

Se dice que el 90% de los pacientes con hernia hiatal y reflujo se controlan adecuadamente con manejo médico. Sin embargo, queda un pequeño porcentaje que necesitará otro tipo de medidas, incluida entre ellas la cirugía.

El tratamiento médico incluye omeprazol, pantoprazol, esomeprazol, etc. Suspensiones protectoras de la mucosa, aceleradores del vaciamiento gástrico (pro cinéticos) y dieta.

También se recomiendan cambios de posición al dormir, aumentando la inclinación de la cabecera de la cama o el número de almohadas.

Dieta: Evitar café, jitomate, chile, condimentos, vinagre, refrescos con gas, alcohol y alimentos demasiado calientes

Tratamiento quirúrgico

Con la llegada de la cirugía laparoscópica y la realización de la primera cirugía de hiato en 1991, la evolución de la tecnología, habilidades de los cirujanos, los resultados positivos para los pacientes han incrementado, haciendo de este un procedimiento muy seguro en manos expertas.

Consiste en pasar el fondo gástrico por detrás del esófago y abrazarlo por delante, fijándolo con unos puntos para crear una zona de presión adecuada que no existe. Además cuando existe hernia hiatal (que es frecuente que coexistan), corregirla.

Bibliografía

Bayerdörffer E, Bigard MA, Weiss W, Mearin F, Rodrigo L, Dominguez Muñoz JE, Grundling H, Persson T, Svedberg LE, Keeling N, Eklund S. Randomized, multicenter study: on-demand versus continuous maintenance treatment with esomeprazole in patients with non-erosive gastroesophageal reflux disease. BMC Gastroenterol. 2016 Apr 14;16(1):48. doi: 10.1186/s12876-016- 0448-x. PubMed PMID: 27080034; PubMed Central PMCID: PMC4831110.